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Jun 03, 2023

El consumidor estadounidense

Cada vez es más difícil para los estadounidenses pagar sus préstamos para automóviles, a medida que los agresivos aumentos de las tasas de interés de la Reserva Federal continúan apretando las billeteras de los consumidores.

Con la Fed elevando las tasas a un máximo de 22 años, los costos de endeudamiento para consumidores y empresas han aumentado, encareciendo los pagos de hipotecas, tarjetas de crédito y, ahora, automóviles.

La tasa de morosidad en las primeras etapas de los préstamos para automóviles, que mide los pagos pendientes de 30 a 89 días, ha superado los niveles previos a la pandemia, lo que representa peores condiciones crediticias para los estadounidenses, según la revisión de riesgos de 2023 del Sistema Federal de Seguro de Depósitos.

"Las tendencias en el rendimiento de los préstamos al consumo podrían deteriorarse en 2023 si el mercado laboral o las condiciones económicas se suavizan", advierte el informe. "Las preocupantes tendencias en la calidad de los activos en los préstamos para automóviles pueden empeorar si los precios de los automóviles se normalizan".

El aumento de los impagos de préstamos para automóviles es otra preocupación más para el consumidor estadounidense, que debe lidiar con tasas hipotecarias que superan el 7% y un aumento alarmante de la deuda personal no garantizada a 225 mil millones de dólares en 2023, según TransUnion. La deuda de tarjetas de crédito de los consumidores estadounidenses superó el billón de dólares el último trimestre por primera vez en la historia, según datos de la Reserva Federal.

Y no son sólo los individuos los que soportan el peso de la campaña de ajuste de la Reserva Federal: tanto a nivel institucional como nacional, el espectro de una deuda creciente continúa aumentando.

El sector inmobiliario corporativo, en particular, está sufriendo: los aumentos de tasas han aumentado el costo de las hipotecas comerciales a más del 5%, encareciendo considerablemente la refinanciación de la deuda.

Los prestatarios de bienes raíces comerciales están luchando por pagar en condiciones financieras más estrictas y una demanda cada vez menor de espacio para oficinas, y ahora, el sector debe lidiar con un aumento de la morosidad a medida que la política restrictiva de la Reserva Federal se filtra en el mercado.

Y a escala nacional, los préstamos del gobierno de Estados Unidos se han acercado a la asombrosa cifra de 33 billones de dólares, y expertos como Ray Dalio y Nouriel Roubini advierten que podría ser el comienzo de una "crisis de deuda en toda regla".

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